Solo nos quedan
veinte kilómetros psrs slcanzar nuestro objetivo.
Empezamos en la rúa do Concello, donde se encuentra el AyuntamientoAvanzamos
de frente durante medio kilómetro y al llegar junto al colegio
y las pistas deportivas giramos noventa grados a la izquierda. Por
una pista de tierra cubierta de hojarasca nos internamos entre un
bosque de eucaliptos, que abandonamos para entrar en San Antón,
aldea de la parroquia de Arca. El lugar toma el nombre de una capilla
asolada
por un incendio (Km 1,3).
Otro bosque nos aguarda a la salida de San Antón. Carballos
autóctonos y eucaliptos reforestados, a granel, nos acompañan
ahora hasta el núcleo de Amenal, de la parroquia de San Miguel
de Pereira. Accedemos por pista asfaltada y pasando el río
Brandelos cruzamos la N-547 por un paso bajo (Km 3,7), al que le sigue
un fuerte repecho que sube a Cimadevila, último núcleo
del Concello de O Pino.
Km 4. Cimadevilla
La subida continúa durante más de kilómetro y
medio pero se torna mucho más asequible. Alcanzada la cota
nos dirigimos al pie de la A-54 y la N-634. Ya no nos extrañamos
al ver la valla de separación repleta de pequeñas cruces.
Forma parte de la idiosincrasia de la peregrinación. Un monolito
esculpido con el bordón, la calabaza y la vieira anuncia la
entrada en el municipio de Santiago (Km 6,3). Rodeamos el perímetro
del aeropuerto, dejando a mano izquierda varias hileras de balizas
(Km 6,7), y después de cruzar una carretera secundaria entramos
en San Paio, aldea de la parroquia de Sabugueira.
Km 7,7. San Paio (Bar)
Rodeamos Casa Quian, afrontamos un breve repecho por pista asfaltada
y tomamos la pista de la derecha, que desciende. Tras salvar la variante
por debajo seguimos descendiendo por varios núcleos de la parroquia
de Sabugueira: A Esquipa y Lavacolla.
Km 9,5. Lavacolla (Albergue. Bar. Tienda. Farmacia)Tras una curva
cerrada pasamos junto a la parroquial de San Pelayo, que luce inscrito
el año de su construcción: 1840. Seguidamente cruzamos
la N-634a y cogemos el desvío a Villamaior. En apenas cien
metros cruzamos el río Sionlla, cubierto de ovas y conocido
como arroyo de Lavacolla, lugar donde los peregrinos se despojaban
de sus sucias vestimentas y se lavaban en vistas de su próxima
llegada a Santiago (Km
10).
Por pista asfaltada iniciamos una cómoda subida que finalizará
en el esperado Monte do Gozo. Atravesamos primero Villamaior (Km 11),
pasamos junto al centro de la TVG (Km 12,7) y giramos 90 grados a
la izquierda para hacer lo propio junto al centro territorial de RTVE
(Km 13,5). Giramos noventa grados a la derecha y continuamos hasta
la urbanización San Marcos, antesala del Monte do Gozo.
Km 14,8. San Marcos (Bar. Tienda)
En lugar de seguir de frente nos desviamos a la izquierda para subir
al monumento erigido en el año jacobeode 1993, el mismo año
que se inauguró el cercano albergue de peregrinos, el más
grande de todo el Camino que es capaz de albergar hasta 300 personas
un año normal y hasta 800 un Xacobeo. Desde este puntoobtenemos
la primera panorámica de Santiago y su catedral.
Km 15,2. Monte do Gozo (Albergue. Bar. Tienda. Cajero)
Retomamos el Camino,
dejando a un lado el acceso a la cafetería y los comedores,
y bajamos hasta un tramo
de escaleras. Acto seguido salvamos por un puente la autovía
y las vías y progresamos de frente por la prolongada rúa
San Lázaro (Km 16,7), donde se encuentran el Palacio de Congresos
y Exposiciones de Galicia y el albergue de peregrinos San Lázaro,
que permite dormir más de una noche. Enlazamos con la rúa
do Valiño (Km 17,7) y continuamos de frente por la rúa
das Fontiñas y rúa dos Concheiros, donde cruzamos la
avenida de Lugo. Después la rúa de San Pedro (Km 19),
que finaliza en el cruce con semáforos de la rúa de
Aller Ulloa.Por el lugar donde se encontraba la Porta do Camiño
entramos en el casco histórico por la rúa das Casas
Reais, que sube hasta la praza de Cervantes. La rúa da Acibechería
nos traslada a la praza da Inmaculada, donde se localiza el monasterio
de San Martín Pinario. Finalmente entramos bajo el Arco del
Palacio por un pasadizo, donde se reúnen a tocar los músicos
callejeros, para acceder a la Plaza del Obradoiro, donde la aventura
termina.